Los noticieros están llenos de malas noticias, así que si tienes una buena noticia para compartir, no te quedes callado, ¡la gente necesita escucharte!
¡Cuéntales a todos!
Una pobre mujer se convirtió maravillosamente y no perdía oportunidad de hablar a otras personas del Salvador.
Un día en que estaba hablando a una amiga que profesaba ser cristiana, le dijo:
¿No crees que llevas demasiado lejos tu afán proselitista?
¿Qué quieres decir?- le respondió.
Es que el otro día, al atardecer, te vi testificar de tu fe al indio de madera del restaurante de enfrente de mi casa.
La chica un poco turbada, respondió:
Es muy posible. Mis ojos están cada vez peor y no distingo bien, pero el hablar acerca de Cristo a un indio de madera no es tan malo como ser un cristiano o una cristiana de madera y nunca hablar de Él.
No te quedes callado, las buenas noticias se deben compartir
Existe mucha gente que ahora está atravesando por momentos verdaderamente difíciles; perdieron a un ser querido, quizás ya no tienen trabajo, su familia está derrumbándose, una enfermedad los tiene completamente agotados.
Si tú conoces la solución, ¿por qué no compartirla?
Tienes una misión importante
Dios nos encargó una gran tarea:
Pues el Señor nos dio este mandato cuando dijo: “Yo te he hecho luz para los gentiles, a fin de llevar salvación a los rincones más lejanos de la tierra”
Hechos 13:47
No te quedes con las Buenas Nuevas, mucha gente necesita escucharlas, necesita esperanza en tiempos tan difíciles como los que vivimos.
Si tienes una buena noticia para compartir, ¡no te quedes callado! Tu misión es llevar luz y esperanza a quienes la han perdido.
Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.
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