El nacimiento de un bebé es maravilloso, y más cuando se lo recibe como un regalo incomparable.
Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto.
Isaías 9:6-7 (RVR 1960)
La humanidad recibió un regalo incomparable con el nacimiento de Jesús, el cumplimiento de la profecía del nacimiento del Mesías es la esperanza viva para la reconciliación de Dios con el ser humano.
Jesús, siendo Dios se hizo hombre para salvarnos, a través de Él somos libres y la victoria sobre el pecado es segura.
El regalo incomparable se comparte
Puede que ya tengas a Jesús como Salvador de tu vida, y eso es maravilloso; sin embargo, debemos compartirlo con los demás, dar a conocer que Él es el único camino hacia Dios.
Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
Juan 14:6 (RVR 1960)No dejemos que este último mes se vaya sin que hayamos hablado a los demás sobre quién es Jesús y qué vino a hacer a la tierra. Hay muchos que sólo lo ven como un buen hombre pero no lo conocen como Salvador, así que seamos quienes reparten la semilla de la fe y del resto Dios se encargará.
MIRA NUESTRA ACTIVIDAD EN LAS REDES SOCIALES