Dolor ajeno

  • 22 Apr, 2020
  • 1620
  • COMPARTIR EN FACEBOOK
  • COMPARTIR EN TWITTER
  • COMPARTIR EN WATHSAPP

En un año sin coronavirus, un año “normal”, si se me permite la ironía, mueren en el mundo 58 millones de personas. Según las Naciones Unidas, la cifra se desglosa así:

 

Por guerras, violencia social y política, 200.000 personas; por enfermedades no transmisibles (cáncer, cardiovasculares, diabetes, efectos de la contaminación del agua y el aire), 36 millones; enfermedades transmisibles, maternales y perinatales, 16 millones; otros (accidentes, homicidios, violencia contra la mujer y los niños), 5 millones.

 

Cincuenta y ocho millones doscientos mil personas. Que mueren, en la mayoría de los casos, lejos de nosotros, sin que eso nos incomode o nos angustie sobremanera. Incluso mucha gente podría decir que para ellos 2019 fue un año bastante “feliz”. Subtitulemos eso: un año de bastante indiferencia hacia el dolor ajeno.

 

Si los números mencionados arriba fueran más o menos fijos cada período, en los 66 años que tengo han muerto en el mundo unos tres mil ochocientos millones de personas. Algo así como la mitad de la población mundial de hoy. Más o menos, al fin y al cabo la muerte no lee las estadísticas.

 

Si durante tanto tiempo no nos importó mucho que gobiernos, industrias contaminantes, estallidos sociales, hambre y desnutrición, violencia social y otros flagelos asesinaran a tantas personas, ¿por qué hoy estamos aterrados por el coronavirus que, en el peor de los casos, llegaría a sumar una cifra de alrededor del 5% de las muertes anuales?

 

Por dos razones: primero, porque ha llegado a nuestro vecindario. Nos amenaza directamente. Ya no es Irak, Yemen, Amazonas, Chiquitania o el Congo. Ronda el patio trasero de nuestra casa y eso nos molesta profundamente. Pensamos por qué Dios no hará algo. No reparamos ni por un momento que la mitad de la población mundial vive en angustias semejantes o peores.

 

Segundo, porque el coronavirus ha reducido severamente nuestro sagrado espacio de libertad. Nuestro legítimo derecho a la “búsqueda de la felicidad”. No podemos circular, ir al teatro, al café, al shopping, a la playa, a la fiesta, a la reunión. Elaboramos teorías acerca de juicios divinos y culpabilidades ajenas. Nos sentimos oprimidos por las restricciones dictadas por la autoridad.

 

¿No les parece que sería hora de poner un poco de perspectiva, abrir el corazón a la solidaridad, la misericordia y el amor hacia otros sufrimientos? ¿A quiénes podríamos ayudar y de qué manera en estos días

 

Sí, nos hace falta mirar al dolor ajeno…

COMENTARIOS

PUBLICACIONES RELACIONADOS

Deja de contemplar el espejo y levanta tu mirada

  • 20 May, 2021
  • 1958
  • En Contacto

Deja de contemplar el espejo y levanta tu mirada

¿Conoces gente que se pierde en su reflejo? Es importante dejar de contemplar el espejo y levantar la mirada.   Perdida en su reflejo Un grupo de turistas estaba via...[leer mas]

El reloj

  • 9 Oct, 2019
  • 1877
  • En Contacto

El reloj

Cierto misionero en China, abochornado por el calor, pensó en tenderse en una hamaca, y para no dormir demasiado puso su despertador a la hora que deseaba  ser desperta...[leer mas]

CORAZON HERIDO

  • 25 Oct, 2017
  • 2905
  • En Contacto

CORAZON HERIDO

Un corazón herido no sólo es el resultado de un fracaso en el noviazgo o matrimonio, sino también es causa del abandono de un padre, una madre, de un...[leer mas]

¿QUIEN SOY YO?

  • 16 Apr, 2016
  • 3175
  • En Contacto

¿QUIEN SOY YO?

"Así que Dios creó a los seres humanos a su propia imagen. A imagen de Dios los creó; hombre y mujer los creó.” Génesis 1:27 (NTV) Muchas veces el enemigo logra quitarnos...[leer mas]

REGRESA A CASA

  • 16 May, 2017
  • 3828
  • En Contacto

REGRESA A CASA

Jesús cuenta la historia de un joven que guiado por sus emociones pidió a su padre la parte de la herencia que le correspondía, para así poder disfrutar...[leer mas]

Estas en medio de una helada...

  • 5 Jun, 2020
  • 1951
  • En Contacto

Estas en medio de una helada...

Henry Ward Beecher, hablando de la virtud del agradecimiento, acostumbraba a contar la historia de un viejo hortelano que siempre insistía en dejar las calabazas en el campo...[leer mas]

Lleva el mensaje de Salvación

  • 24 Oct, 2019
  • 2711
  • En Contacto

Lleva el mensaje de Salvación

En tiempos de Jesús, se hizo evidente que la necesidad de las personas por llegar a Dios era grande, las Escrituras dicen que al ver las multitudes, el Señor tuvo com...[leer mas]

El problema no está en el Evangelio, sino a quién amas

  • 10 May, 2021
  • 1431
  • En Contacto

El problema no está en el Evangelio, sino a quién amas

  Seguramente escuchaste a alguien decir que el evangelio no sirve, que la gente sigue sufriendo y que si Dios existiera no pasarían cosas malas; sin embargo, el probl...[leer mas]

Los hermanos juntos

  • 29 Sep, 2022
  • 1124
  • En Contacto

Los hermanos juntos

¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía! Salmos 133:1 (RVR 1960). Seguramente muchos padres afirmarán que...[leer mas]

Suficiente maná para un año

  • 29 Jun, 2020
  • 1924
  • En Contacto

Suficiente maná para un año

Uno de los discípulos del Rabino Ben Jochai, le preguntó por qué Jehová no proveyó suficiente maná de una sola vez para suplir las necesid...[leer mas]

Una maravillosa invitación

  • 21 Nov, 2024
  • 450
  • En Contacto

Una maravillosa invitación

Cada milagro de Jesús lo podemos tomar como una invitación a la fiesta de lo que será la eternidad. Celebraremos viendo todas las maravillas de Dios, Su g...[leer mas]

LA LISTA

  • 28 Dec, 2016
  • 2738
  • En Contacto

LA LISTA

Un comerciante cristiano fue requerido para ayudar a una colecta para cierta obra de la iglesia. Gozosamente escribió un cheque por 250 dólares y lo entregó al...[leer mas]

MIRA NUESTRA ACTIVIDAD EN LAS REDES SOCIALES