¿Alguna vez has defendido a alguien que amas? Seguramente a ninguno le gustaría que trataran mal u ofendieran a un ser querido, por tanto saldríamos a socorrerlo de inmediato. ¿Sabías que el Señor también sale a defendernos?
El Señor, en diferentes partes de la Biblia, nos muestra que nos ama, está con nosotros y es nuestro protector; en esta oportunidad quisiera compartir contigo una forma particular en la que Él resguarda a uno de sus hijos.
“Poder hay en mi mano para haceros mal; mas el Dios de tu padre me habló anoche diciendo: Guárdate que no hables a Jacob descomedidamente.” Génesis 31:29 (RVR 1960)
Jacob había servido a Labán por muchos años en los cuales fue víctima de diversas injusticias, por lo que tomó la decisión de irse a escondidas con su familia y todas sus posesiones. Al enterarse Labán que Jacob se iba se puso furioso y fue tras de él para hacerle daño o quitarle todo lo que tenía (como se menciona en versículos posteriores) pero Dios le advierte en sueños que no trate mal a su siervo.
¿Cómo te sientes cuando alguien te protege? Cuando nuestros padres, hermanos o amigos salen en nuestra defensa nos sentimos amados porque se preocupan por nosotros. Así mismo, esta es otra manifestación del amor de Dios, y deberíamos estar agradecidos con Él por su cuidado y preocupación por nuestras vidas.
“… jamás duerme el que te cuida.” Salmos 121:3
Cuando alguien se preocupa por tu vida es porque te considera valioso, por tanto, te animo a reconocer lo que Dios hace y a darle las gracias por su infinito amor por ti. También te animo a mostrar el amor del Señor a otras personas siendo un protector para los que lo necesitan.
¡Busca protección en los brazos del Señor!
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Artículo producido para Radio Cristiana CVCLAVOZ.
MIRA NUESTRA ACTIVIDAD EN LAS REDES SOCIALES