“Quiero pedirles un gran favor: todos podríamos cantar Cumpleaños feliz a nuestros PumaKatari”, dijo ayer una anfitriona de la ruta hacia Chasquipampa.
Casi de inmediato los pasajeros, entre niños, jóvenes y adultos, comenzaron a cantar y aplaudir a los buses PumaKatari. La celebración terminó con palabras de agradecimiento y sonrisas de los usuarios, en especial de los más pequeños.
“El Puma es parte de mi familia. Nos da seguridad y un gran servicio”, comentó ayer uno de los usuarios.
El 24 de febrero de 2014 se lanzó el servicio del PumaKatari con una flota de 61 buses. Las tres primeras rutas de atención fueron Inca Llojeta, Villa Salomé y Chasquipampa.
En 2016 se amplió el servicio en una segunda fase con otras tres rutas más, Caja Ferroviaria, Kalajahuira e Irpavi II y la flota de buses se amplió a 141, que operan en toda la urbe.
En marzo del año pasado llegaron 33 nuevos buses y en total sumaban 174. Hasta finales de agosto se inauguró la séptima ruta hacia Achumani.
Este sistema nació con la idea de servir al ciudadano y convertirse en un espacio inclusivo. Por ejemplo -según los funcionarios de este servicio- cada mes se transportan a mil usuarios con sillas de ruedas y además 1.500 bicicletas en promedio.
El ataque a los Puma
La noche del domingo 10 de noviembre, los parqueos de buses PumaKatari de Chasquipampa y Achumani fueron atacados e incendiados por cientos de personas afines al Movimiento Al Socialismo (MAS). Este hecho se registró horas después de la renuncia de Evo Morales a la presidencia.
En esa jornada violenta, los atacantes quemaron 64 buses que se encontraban parqueados. Este hecho representó para la comuna paceña una pérdida aproximada de 11,7 millones de dólares.
Fuente: Pagina Siete
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